jueves, 18 de septiembre de 2008

Disposición final de la basura

La eliminación de los residuos sólidos por el método de relleno sanitario es considerada como una técnica de disposición final, que tiene en cuenta principios esenciales de ingeniería sanitaria a fin de evitar todo tipo de contaminación que resulte nociva para la salud pública y el medio ambiente.

Todas las fases de implementación de la técnica de relleno sanitario, desde la selección del emplazamiento, la preparación del terreno, las obras de infraestructura, la ejecución propiamente dicha, el control ambiental, el uso posterior previsto para las áreas rellenadas y su integración al paisaje circundante deben ser estudiadas y planificadas adecuadamente. Los rellenos sanitarios tienen como finalidad darle un destino cierto y seguro a los residuos sólidos que se generan en los núcleos urbanos.

Se deben diseñar rellenos sanitarios de modo que:

Aseguren la disposición ambientalmente adecuada de los residuos domiciliarios y comerciales e industriales no peligrosos.

Eviten perjuicios al ambiente y los recursos naturales.

Aprovechen eficazmente la capacidad disponible.

Tengan costos aceptables para los usuarios tanto públicos como privados.

Se ajusten a las normas tanto nacionales como internacionales (EPA), de modo de cumplir, no solo en forma estricta la normativa ambiental vigente, sino además la adecuación de los requisitos técnicos al nivel de las exigencias internacionales (US-EPA).

Controles
En todos los rellenos sanitarios se efectúa periódicamente un completo control ambiental, que permite conocer la evolución de cada uno de ellos.
El control se efectúa antes de la implantación del relleno; durante la fase operativa y la etapa posterior de clausura; de modo de garantizar que no se afecten las aguas subterráneas ni las superficiales. Las mediciones que se realizan tienen por objeto determinar y asegurar el mantenimiento de la calidad de los acuíferos y las napas de agua subterráneas y superficiales. Para tal propósito, existen pozos de monitoreo, ubicados aguas arriba y aguas abajo del emplazamiento, según el sentido de escurrimiento de las napas. Periódicamente se cumple con un programa de monitoreo y las muestras que se toman son analizadas por el Instituto Nacional del Agua y del Ambiente (INAyA). Al mismo tiempo, se efectúa el control de los gases generados y la corrección de los asentamientos que se produzcan.

Fuente: tq.educ.ar

2 comentarios:

Anónimo dijo...

super la pagina

Anónimo dijo...

excelente la pagina